LA DÉCIMA FRASE:
“Él es Todopoderoso”
Es decir, Allah es Uno y Único, tiene poder sobre todas las cosas. Nada es difícil para Él. Crear la primavera le es tan fácil como crear una flor, y Él crea el Paraíso con la misma facilidad que crea la primavera. Los innumerables elementos que Él crea constantemente cada día, cada año, cada siglo, son testigos con un sinfín de lenguas que expresan el poder ilimitado de Allah. Así, esta frase trae albricias:
“¡Oh, ser humano! El servicio que has ofrecido y los actos de adoración que has realizado no son en vano. Un reinado de recompensa, una morada de felicidad, han sido preparados para ti. Un Paraíso Eterno te está esperando en lugar de tu mundo efímero. Ten fe y confianza en la promesa del Creador Glorioso a Quien conoces y a Quien adoras, porque Él nunca rompe Sus promesas. No existe absolutamente ninguna deficiencia en Su poder, la impotencia no puede interferir en Su trabajo. Tal como crea tu pequeño jardín, tiene el poder de crear un Paraíso para ti, y así lo ha hecho y te lo ha prometido. Y porque te ha prometido el Paraíso, por supuesto que te admitirá en él.
“Ya que podemos observar que cada año Allah junta y dispersa trescientos mil especies de plantas y animales sobre la faz de la tierra con perfecto orden y equilibrio, con perfecta facilidad y rapidez, ciertamente Él, Todopoderoso y Glorioso, es capaz de cumplir Su promesa. Y por ser Todopoderoso, crea ejemplos de la resurrección y del Paraíso de mil maneras año tras año.
“Y como prometió la felicidad eterna en todos Sus Libros revelados, Él anuncia albricias del Paraíso; y como todas Sus acciones y obras son realizadas con veracidad y seriedad; y como a través del testimonio de todas sus obras de arte, todas las perfecciones señalan y dan testimonio de Su infinita perfección, sin ningún tipo de defecto o falta; y como romper promesas, mentir, ser falso y decepcionar son cualidades horrendas además de ser defectos y fallas; entonces con seguridad podemos afirmar que el Todopoderoso, el Glorioso, el Omnisciente, el Perfecto, el Más Misericordioso, el Más Bello cumplirá su promesa: Él abrirá la puerta a la felicidad eterna;
Él te admitirá en el Paraíso, ¡oh, creyente!, que era el hogar original de tu antepasado Adán”.