La Vigésimotercera Palabra | Capítulo Primero | 1
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LA VIGÉSIMOTERCERA PALABRA

 

(Esta Palabra consiste en Dos Capítulos)

En El Nombre De Allah Clemente Y Misericordioso



Hemos creado al hombre de la manera más hermosa, luego lo precipitaremos hacia el grado más bajo de la escala excepto a los que hayan creído y hecho el bien”  (Corán 95, 4-6)

 

Capítulo Primero

 

Explicaremos en “Cinco Puntos”, entre miles, las virtudes de la fe.

PRIMER PUNTO: A través de la luz de la fe, el hombre se eleva a lo más alto de toda su escala logrando un valor que le hace merecedor del Paraíso. Mediante la oscuridad de la incredulidad, desciende a lo ínfimo de toda escala. Se convierte en un merecedor del infierno. Porque la fe enlaza al hombre con su Creador Todo Glorioso. La fe es una relación. Por ello, el ser humano obtiene su valor mediante el arte de la virtud Divina y de las inscripciones de los nombres Divinos, las cuales llegan a  manifestarse en él a través de la fe. La incredulidad quebranta dicha relación. Debido a esta ruptura el arte Divino se esconde. Su valor entonces, se reduce en su materia, y por la sustancia solamente tiene una vida animal  transitoria, El valor de esta vida animal y temporal  es nulo porque pasa. Explicaremos este misterio con un modelo.

Por ejemplo: “El valor de un material difiere del valor del arte entre las artesanías del hombre. A veces ambos valores llegan a igualarse, a veces un material vale más que la propia obra y otras veces ocurre que en un elemento de hierro, que vale cinco céntimos se convierte en una obra que vale cinco dólares. Quizás, a veces una obra de arte antigua tiene un valor de un millón de dólares pero su material no llega a costar cinco céntimos.

Una obra de arte antigua, si se lleva al mercado, se expone  y se anuncia con el nombre de su famoso artista  se puede vender por un millón de dólares. Si llevamos la misma obra a un mercado de chatarra, se puede recibir, a un valor de hierro, cinco céntimos.”

Así, el hombre, es la obra  perfecta del Creador Todo Poderoso. También él es su poder más sutil y milagroso ya que Él creó al hombre como una manifestación de todos Sus Bellos Nombres e inscripciones y en la forma de un minúsculo ejemplo del Universo.

            Una vez que la luz de la fe se haya instalado en el ser humano, todas las inscripciones significativas se leerán. Él fiel lo percibirá. Hará que los demás lo observen mediante esta relación, es decir, con el arte Divino en el hombre se manifiestan  los significados como: “¡He me aquí, obra del Altísimo Creador y Su Criatura, mirad como en mí, se manifiestan Su misericordia y generosidad!” Entonces la fe, que es una relación de su Creador hace aparecer todas las obras de arte en el hombre. El valor del hombre se realizará según esta obra Divina, y su virtud dependerá 

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